Ángel nos conoció en Instagram.
Con una profesión donde se usa más el intelecto, hacía teletrabajo y sin ubicación fija. Por esa razón pasaba muchas horas sentado frente a un ordenador.
Como no tenía residencia fija, estaba apuntado hasta en tres gimnasios distintos en diferentes ciudades, pagando semanalmente y simplemente «yendo a entrenar». Destaco esto último porque «ir al gimnasio» no implica «progresar físicamente», y así es como él nos lo contó en una entrevista.
Sus malos hábitos lo llevaron a estar en su peor forma física. Había acumulado mucha grasa, rondando los 85 kg de peso.
La frustración que tenía era alta. Había ya intentado muchas veces un cambio físico, pero no lograba mantenerlo. Contrató en esos intentos las típicas asesorías fitness que se venden en forma de «planes trimestrales», y siempre con los mismos resultados:
Ya estaba hasta los coj**** de esta montaña rusa de pérdida de grasa acelerada y luego vuelta a recuperarla.
¿Y sabes lo peor?
Que haciendo eso acabas por no ganar músculo, de hecho, puede que incluso lo pierdas por planes tan radicales de bajada de peso.
Eso no nos interesa para nada. La masa muscular es la que te ayuda a verte (y a estar) bien en cuanto a estética y salud.
Entonces lo que queremos es estar el máximo tiempo posible con un entorno favorable a esa ganancia de masa muscular. Pero como estamos constantemente subiendo y bajando grasa, no lo conseguimos. O sea, que en esa situación, perdemos el tiempo por mucho que vayamos a entrenar.
Hasta ese momento, Ángel iba por inercia, probando rutinas, escuchando a uno y a otro, probando servicios… Pero todo parecía no funcionar. Estaba estancado.
Cuando supo de nuestro Programa Año Salvaje, se interesó.
Le atrajo la metodología basada en la sencillez y organización pensada para personas normales y corrientes que no viven por y para el gimnasio. Además con resultados muy salvajes, que él los veía publicados.
Hasta ahora todos sus intentos se habían basado en el «sacrificio» y la «disciplina por rachas». Y vio que en nuestra forma de trabajar no existía esa presión por hacerlo todo perfecto —cosa que es imposible—, y encima, añadíamos formación para que se supiera en todo momento el por qué de lo que hacíamos.
Así que se lanzó y entró a Año Salvaje.
Nuestra metodología divide el proceso de cambio físico en etapas.
Cada una con el objetivo de dominar unas habilidades, coger unos hábitos, aprender una serie de conceptos, y por supuesto tocar unos objetivos físicos a nivel visual y de rendimiento en los entrenamientos.
La primera se llama Valle de la Muerte porque es el momento en el que abandonaría una persona que se enfrentase por su cuenta a ese «primer mes de gimnasio» o «primer mes de proposición de cambio físico».
En esta etapa los objetivos son:
En el caso de Ángel empezó esta etapa en diciembre.
Para muchos una locura… ¿Cómo pudo ponerse con el cambio en unas fechas tan señaladas? En el siguiente vídeo te lo cuenta:
La realidad es que nuestro método es tan sencillo y adaptado que no existe un «mejor momento» para empezar.
El mejor momento es cuanto antes mejor, porque se trata de unos hábitos que se mantienen todo el año. Con que un 70% se cumpla el plan, ya progresas semana a semana.
Tras recibir el plan, comenzamos a solucionar dudas y a avanzar.
Una vez rematado ese primer mes, con todos los fundamentos claros, y sabiendo ya cómo entrenar con seguridad y comer con orden; pasamos a la Etapa Trinchera.
Es una etapa de transición a la pérdida de grasa seria.
Durante un mes nos centramos en aumentar la intensidad en los entrenamientos (ahora que ya tenemos la técnica controlada) y empezamos a ver los primeros resultados de la bajada de peso.
Ángel llevaba perdidos ya unos 2-3 kg de grasa, teniendo en cuenta las navidades de por medio.
Y por supuesto, empezó a notarlo, sobre todo en cómo le quedaba la ropa.
Aquí lo cuenta:
En la Etapa Espartano ya entramos de lleno a la pérdida de grasa.
Buscamos llegar a una cantidad de grasa aceptable para poder ganar masa muscular sin vernos mal.
Con Ángel empezamos a ver las primeras bajadas de peso corporal y cintura de forma constante:
No se trata de bajar peso a toda costa. Si no de coger un ritmo de bajada en el que no prohibamos nada ni aparezca la ansiedad.
Para conseguir un físico estético y sostenible se debe tener paciencia y saber abordar cada. problema que surge semanalmente. Por eso es tan importante en nuestra metodología el acompañamiento.
Durante todo este proceso Ángel tuvo que aprender a lidiar con el exceso de comidas y fiestas, algo que en otras ocasiones no habia conseguido dominar.
Fuimos dándole estrategias y explicaciones que lo llevarían no solo a disfrutar de los festivos sin remordimientos, sino pasar por ellos y salir mejor incluso.
Una dificultad añadida de Angel es que tenía más compromisos semanales que una persona normal (varias salidas de comidas fuera, hasta 3-5 en algunas semanas).
Pero siempre se esforzaba por cumplir como toca en los días normales. Y cuando podía, compensaba con otras semanas donde lo hacia todo al dedillo:
Algo vital en el caso de Ángel para esa pérdida de grasa ha sido el movimiento diario.
Es una de las cosas más infravaloradas y que más suman a este proceso.
¿Por qué? Porque aumenta tu gasto de calorías, y por tanto puedes comer más sin frenar la quema de grasa.
Terminamos la fase Espartano en 70,1 kg y 76 cm de cintura, lo que suponen un recorte de 20 cm en cintura y 14 kg de peso corporal menos.
La cuarta etapa es Rock N Roll.
En ella buscamos tener un buen entorno para crear toda la masa muscular que se pueda.
Con Ángel hicimos esta etapa más corta de lo normal, porque él eligió hacer de forma más lenta las tres primeras etapas para mantener su ritmo de vida en cuanto a comidas fuera, festivos y viajes.
Hicimos la fase de Rock N Roll desde Navidades (aprovechando las fiestas) hasta el mes de Marzo de 2025.
Actualmente estamos en plena Etapa Salvaje buscando definir los abdominales por completo.
[ACTUALMENTE ESTAMOS EN ESTA FASE]
A falta de la última etapa, en la que estamos actualmente, Ángel ha conseguido:
¿Qué recomendaría hacer Ángel a una persona estancada con su físico?
¿En qué casos recomienda Ángel el Programa Año Salvaje?
¿Te gustaría vivir el mismo proceso de cambio físico?
Hay dos maneras de conseguir una plaza en el Programa Año Salvaje
Entrar a Par de Semanas Salvajes, que es una especie de prueba de 14 días con una versión reducida del Programa. En ella comprobamos si podemos trabajar contigo, y al final de las dos semanas te decimos si es posible o si no.
Y la otra opción, si ya nos conoces o tienes claro que este programa es para ti, es solicitar el acceso mediante un formulario y las conversaciones posteriores que creamos convenientes.
Aquí dejo los botones a cada una de las opciones: